Son las 7’15 de la mañana del 25 Abril, nuevamente estoy apretándome los cordones de mis botas, pensando si deberé meter las polainas, ya que probablemente nos encontremos nieve en la ascensión al la Portilla Jaranda desde el lado norte; en efecto mi compañero de senda habitual me manda un mensaje, “coge polainas y gafas para la nieve…”. Echo un vistazo último a la mochila, para comprobar que llevo todo lo necesario (bocata, zumito, una barrita de cereales…) y por su puesto con mi cámara.

Subimos al autobús que nos llevará desde Navalmoral a Plasencia, para coger más tarde la Nacional que une Plasencia con Ávila a través del precioso Valle del Jerte. El día es genial ni una nube, tan sólo nieblas matinales cubriendo las ondanadas del camino, subimos por el Valle, el manto blanco que cubría hace unos días los cientos de cerezos, ya no están pero más arriba donde las temperaturas son más frías, donde la primavera se hace de esperar, empezamos a ver eso color que caracteriza al Valle durante la inicios de la primavera.


Llegamos al puerto de Tornavacas, donde limita la provincia de Cáceres con la Avilense, tomamos una senda que avanza hacia el sur en dirección de la Sierra de Gredos. La ruta empieza bien surgen algunas dudas de por donde coger la pista forestal que nos llevara a la Loma de los Sillares, enseguida encontramos la solución; como la estamos viendo pues decidimos tomar la trocha, a través de unos piornillos llegamos a la senda y empezamos a progresar, saltamos una primera valla y seguimos subiendo por la pista.

Hoy es mi primera salida con el CECA, y la verdad es que está siendo genial, la gente anda bien y la ruta promete, llegamos por la pista a una cancela, estamos ya en el Collado del Herido pasando a través de ella vamos por un sendero que nos llevará a media altura de la montaña, rodeándola, el guía turístico de la Ruta nos comenta que la zona que atravesamos es preciosa en otoño, los robles árboles como bien sabemos son de hoja caducifolia, muestran un color amarillento y cobrizo, dando un aspecto mágico al paraje.

Esta senda no llevará a la Garganta de St. Martín, poco a poco empezamos a vislumbrar la garganta encajonada y unas casas de piedra preciosas a la ribera del cauce, nuevamente el guía comenta que pertenecen a un abogado y que actualmente las utiliza el Forestal, de hecho vemos que hay un jeep del ICONA al lado. Al fondo cerca del puente que cruzaremos para empezar nuestra primera ascensión vemos una tercera casa, esta vez de cabreros.

Llegados al puente hacemos el primer alto, para tomar un aperitivo y coger fuerzas por el camino empedrado en forma de zigzag aunque algunos decimos visto lo visto hacer la distancia más corta“la recta”, que nos dejara en “La Cuerda Llana (1848m)”.

En la subida la gente se empieza a distanciar, me detengo mirando para atrás y saco la típica instantánea “¿Dónde está Wally?”, decido sacar el segundo palo para aumentar “mi tracción” ya que cada vez la idea de haber subido por la trocha se hace más difícil y cuesta, veo un poquito de nieve arriba probablemente hilo todo, en efecto tengo que dar un pequeño rodeo. Llegamos Laguna y yo arriba (La cuerda Llana) viendo como progresa el resto de gente, la vista es increíble la sierra más adelante esta completamente nevada, este año está siendo magnífico, desde aquí podemos divisar al Norte; “Cerro Peñanegra” y al Sur “La Angostura” y la “Garganta de la Serra” hacia la cual nos dirigiremos. Decimos sacarnos unas fotos de grupo cuando estamos todos y esperar a algunos rezagados que se han ido quedando atrás, hoy no hay prisa.

Marchamos de nuevo hacia “La angostura”, allí nos encontramos a nuestros compañeros de Plasencia que hoy están haciendo la misma ruta que nosotros. Visto como está la subida a la Portilla decido estrenar mis polainas, y poner pie, David y yo nos sacamos una estampa allí, y empezamos a ascender. La subida será fácil ya que algún compañero ha hecho huellas para amenizar la subida, de todas formas yo me salgo del sendero y decido señalar las mías propias. La ascensión se está saliendo y la moral alta así que progresamos bastante bien, una vez arriba alto y fotos a todo lo que se mueve, mirada al fondo y podemos contemplar toda la garganta Jaranda hasta nuestro destino “Guijo de Sta. Bárbara”, recordando la ruta que hicimos con Mario en Semana Sta, la vista es preciosa del Macizo Central y del Valle del Vera.

Comenzamos el descenso y un poquito más abajo paramos a comer, momento de reponer fuerzas. Una vez tomado el café incluido empezamos el descenso hasta el pueblo. De camino pasaríamos por el Poblado del Pimensaillo, mirando hacia atrás vemos la Portilla, esta preciosa con el color verde que le da el musgo y los líquenes a las piedras.

La garganta está increíble, lleva un caudal enorme que a veces invade el propio camino y el charco del Trabuquete cae con fuerza.


Aquí estamos de nuevo, Sábado 3 de Abril, volvemos a quedar para hacer un poquito de piernas esta semana santa que con tan buen tiempo nos está premiando. Esta vez, se une a nosotros un tercer mosquetero, Mario, que nos pondrá su humor durante toda la ruta.

Son las 9 de la mañana y quedamos en nuestro punto de encuentro habitual, quedamos un poco más tarde porque esta vez queremos unir la ruta con una cena de amigos en nuestro lugar de abituallamiento, Restaurante Ropino, y así recuperar lo perdido de las vacaciones... Marchamos en curso nuevamente, esta vez iremos hasta la localidad del Guijo de Santa Bárbara, que por tan buenos licores nos recuerda.



Desde el pueblo cogemos la ruta del Trabuquete, en el que al inicio tenemos un mapa con toda la ruta e información sobre las cosas que iremos viendo. Repasado los apuntes geográficos empezamos la progresión garganta arriba pasando por diversos puentecillos que van sorteando la garganta. Sobre 30 minutos más tarde de haber partido llegamos al primer punto de parada obligatoria, "El Trabuquete", nos echamos unas cuantas fotos y la conversación habitual "joder, cuanta agua lleva este año la garganta, haber si para veranito venido y disfrutamos de estas nieves que han caído". Levantamos la cabeza y vemos que en la pared de enfrente hay varias cabras montesas, otra foto más.



Iniciaremos la subida y por delante llevaríamos a dos excursionistas de talayuela que llevaban una buena marcha. Al llegar al desvío que sube hacia la Ermita de Nuestra Señora de las Nieves, decimos progresar montaña arriba para llegar al poblado de chozos, cerca ya de la portilla Jaranda. Las nubes empiezan a ganarnos terrenos, incluso a llegar cerrarse bastante con la niebla, la moral muy alta, como siempre, encontramos a los dos jóvenes que vienen de vuelta, resulta que se han confundido porque ellos querían subir a la Ermita. Les comentamos que nosotros vamos a subir primero a los chozos y después bajaremos para tomar el camino a esta. Con lo que se animan a hacernos compañía durante buena parte del día.


Llegados a los chozos hacemos el alto en uno para repostar unos cacahuetes y tomar un poquito de agua, por momentos la niebla nos tapa y no deja ver las maravillosas vistas del valle y de la portilla. Reanudamos la marcha hacia el desvío una vez allí progresamos durante una pendiente bastante maja, que nos llevará a los famosos "Camapanarios".



Durante el camino vemos un montón de cabras hispánicas, todas ellas bastante pequeñas, al llegar a los Campanarios, las vistas son preciosas, tengo que agradecerle a David la elección de este primer findesemana de ruta, porque la verdad es que no recordaba que cerca de mi casa tenía estos bellos parajes.



Seguiríamos progresando ladera arriba hacia la Ermita, siendo el último tramo un poquito más difícil debido a la pendiente que presenta, pero bueno con nuestros nuevos compañeros de ruta la verdad es que se amena bastante el día. Por fin coronamos la Ermita, donde nos separaremos los 3 mosqueteros moralos, de nuestros nuevos compañeros que iniciaran el descenso para el Guijo. Las nubes poco a poco dejan vislumbrar la impresionante vista del valle del tietar, del pico del Estecillo y de la portilla. Con tanta foto nos entró el hambre y repetiríamos el menú que tanto nos gusta, bocata de jamón con queso.


Como no teníamos prisa hicimos un buen alto en la Ermita, visitando la capilla y firmando en el libro de visitas, con algún comentario gracioso. Más tarde nos entró el mono de subir un poquito más en dirección al Estecillo, y claro, el ansia nos pudo, pusimos dirección hacia este siguiendo una vereda que algunas veces se perdía desde la Ermita hacia el Estecillo.



Por supuesto, no llegamos a coronarlo nos quedamos más abajo en un chozo bastante cuidado que nos encontramos, durante el camino, nos estuvo cayendo el famoso calabobos bilbaíno y más tarde empezo a nevar con fuerza y con bastante viento, gracias a mi madre que estuvo hábil y me dio un peto por si a caso, tiré de el y la verdad es que se agradeció. Como el tiempo no amainaba pusimos descenso de nuevo hasta la Ermita para descender hacia el Guijo y dar por concluida nuestra marcha.

El descenso fue agradable, las precipitaciones dejaron de caer y disfrutamos de un sol bastante generoso. Una vez en el pueblo hicimos alto para recuperar azucares con un buen limoncillo y unas cañitas bastante frescas.



Esta ha sido nuestra primera ruta juntos, unos días atrás no llamamos para ver que ibámos hacer estas vacaciones de semana santa y así romper un poco con la dinámica de todas. David llevababa saliendo desde verano pasado como senderista en solitario y más tarde como miembro del CECA, yo (Rubén) con algunas experiencias individuales por la sierra de Guadarrama en la comunidad de Madrid. David propuso que hiciéramos esta ruta para ir abriendo apetito y en definitiva disfrutar de un día en nuestras tierras de Gredos.


La marcha empezó a las 9'00 h tras 1 hora de viaje desde Navalmoral de la Mata hasta la pista forestal de la localidad del Raso que da acceso a la garganta Tejea, tras dejar el coche al lado de otro que me comento David que ya lo había visto en anteriores excursiones, no le dimos mayor relevancia aunque más tarde nos enteramos de buena mano que sería del marivilloso escritor y montañero Carlos Frías.

La mañana tenía muy buena pinta aunque las nubes matinales nos tapaban muchas veces la cumbres, y la preciosas vistas de "Los Hermanitos". Tras andar un rato llegamos al puente edificado en 1971 por Domingo Blazquez que unía la ruta de los hortigales a los Chozos del Tío Domingo. El camino en principio no presentaba ninguna dificultad aparente la pendiente era bastante asequible además de una buena señalización por los famosos hitos de piedras que encontramos a lo largo del todo el camino, cogimos la ruta que va muy paralela a la garganta de Tejea, aunque algunas veces nos costaba ver los hitos.



Las vistas la verdad son fabulosas desde el principio podíamos ver el majestuoso Almanzor y sus Canalas Oscuras hasta arriba de nieve (ojolá que dentro de unos años podamos decir que hemos subido, por ahora a ganar experiencia y a respetar la montaña, recuerda Gredos es más fuerte que tú), a medida que ibamos trapando por el cauce de la garganta, que tras este año de nieves y bienes baja bastante generoso y comprobar sus ricas aguas, iríamos vislumbrando la portilla y la peña Chilla a un lado.


Después de andar unas horitas parándonos a echar fotos adoquier (ahora es cuando mi CANON 1000D me está rindiendo) llegamos a los Chozos del tío Domingo, he de decir que la verdad de los 3 que encontramos 1 de ellos está bastante conservado, David me comentó que aparte de su uso pastoril, montañistas le daban uso para hacer noches antes de la escalada a la portilla y rutas mayores.



Decidimos subir un poco más por la garganta hasta que llegamos a un punto en que el caudal estaba bastante alto y como tampoco queríamos forzar por se la primera ruta decimos bajar de nuevo hasta las chozas y almolzar un sabroso bocata de jamón en la primera, en la mesita de piedras que está fuera del chozo.


Un rarito más tarde emprendimos la vuelta por el sendero que va más arriba de la garganta llegando de nuevo al puente y haciendo un alto para despedirnos. Emprendimos la vuelta al coche y llegado a la pista como nos sobraba parte de la tarde nos decidimos subir hasta la majada de chozas que hay por las ruta del tío Domingo, donde nos encontramos con un ya conocido pastor (por david) que le comento que tenía un bastón que había olvidado este en sus rutas anteriores en la majada, muy majo el chaval que se acordó de guardarlo, y ahora es cuando viene lo mejor resulta que una de las chozas nuevas que han habilitado esta ocupada los fines de semana y festivos por nuestro amigo escritor Carlos Frías, pero que no pudimos conversar con el porque nos comentó el pastor que le habían operado de la garganta recienteme y no podía hablar, esperamos que se recupere pronto y nos ilustre con su experiencias sobre la serranía.


En esta última foto daros cuenta del detalle, "nuestra amiga la cabra montesa" se dejo ver, más bien nos oteaba a nosotros, como diciendo "¿pero dónde irán estos dos?".

El resto de fotos, las teneís en la galería de "Piccasa" (acceso libre).


Bienvenidos a todos
15:04 | Author: Ruben
Este blog nace con la intención de publicar y comentar rutas de senderismo y montañismo que iremos haciendo dos amigos extremeños por distintos parajes, del sistema central. Además de hablar con el tiempo aspecto sobre equipamiento en montaña así como herramientas.

Esperamos que os guste, un abrazo